domingo, 24 de febrero de 2008

El viaje de la Nonna

Anoche fui a ver una película que me dejo un delicioso sabor de boca: el viaje de la Nonna.

Primero, debo aclarar que mi objetividad está viciada porque el personaje central de la película es una abuelita, una viejita que después de enviudar sueña con ir al pueblo italiano donde nació su marido, el asunto es que ya está muy grande para que viaje una distancia tan larga, así que la familia decide recrearle el viaje sin salir del país y dejarle el recuerdo en video y fotos.

La verdad es que tiene muchas cosas que dudo que a ninguna familia le sucedan, pero la justificación de ese viaje irreal viene de todo lo real del amor de una familia por quien ha sido su matriarca. Y sobre este supuesto, quien no ha pecado de amor con alguien a quien queremos hacer feliz?

Todo el “viaje” es una parodia de todos los clichés italianos que existen, hasta la escena de la boda de Mike Corleone del padrino es recreada, así que te la pasas riéndote con los mexas intentando hablarle a la bella Nonna… Dentro de las muchas escenas reales de lo irreal, es que situaron cosas que suceden en los hogares que tienen el privilegio de tener a un anciano en ellas; como las escapadas de la Nonna, los olvidos temporales, el carácter férreo y tenaz de sus años, así como lo que sienten los hijos que los cuidan y quieren.

Otra de las cosas que llamo mi atención, es que esta película mexicana (a diferencia de casi todas las películas mexicanas que ahora salen) no tuvo necesidad de soltar en los diálogos ni una majadería, ni escenas de sexo o violencia… se pudo retratar a una familia mexicana, sin desintegrarla o denigrarla. (Lo dice alguien que dice majaderías y que se crio en una familia “disfuncional” de mamá y abuela).

Como era de esperarse llore mucho al final, no solamente porque me hizo recordar aun más a mi querida abuela, sino porque esta película te hace pasar de la risa a las lágrimas. Y no es porque venga una escena trágica de dolor, si no porque creo que todos nos reflejamos de alguna u otra manera en algún personaje de la familia: así fuera la hija rebelde a la que la abuela quiere a pesar de todo, el hijo que se convierte en la oveja negra de la familia pero que adora a la viejita o la mujer divorciada que cuida de su madre… hay para todos.

Tal vez me influencie mucho la nostalgia que siempre tengo sobre mi abuela y mi interés por los viejitos… tal vez sea la tos y mi garganta cerrada, tal vez sea el clima de melancolía y soledad que algunos sentimos unos días más que otros, puede ser que en realidad este haciendo una crítica a una película que me pareció muy buena.


Creo que lo que me cautivo más al finalizar la proyección, es que me quede con la sensación de que fue el amor incondicional el personaje principal de la película. Como no me iba a conmover algo así?


-Last night I saw you in my dreams, now I cant wait to go to sleep.-

1 comentario:

Oliveira dijo...

Son ciertas las memorias

y la soledad

La vida es cierta

y el olor a lluvia

Todos estos días son ciertos

Es cierto el pez

y el deseo de cambiar las cosas.

Entrar en los cafés es cierto

y salir al mundo

Agarrarse de él un instante

. . . Y morir después!